lunes, 17 de mayo de 2010

ACEPTO TODAS LAS PARTES DE MI MISMO

Mírate en el espejo y di: "Me amo y me acepto exactamente tal como soy". ¿Qué es lo que te viene a la mente? Observa como te sientes. Quizá sea esto el centro de tu problema.
Lo más importante del proceso de sanarnos o de integrarnos en un todo es aceptarnos totalmente a nosostros mismos, con todas nuestras múltiples partes. Aceptémonos cuando actuamos bien y cuando no lo hacemos tan bien, cuando nos asustamos y cuando demostramos nuestro amor, cuando nos comportamos tontamente y cuando nos mostramos brillantes e ingeniosos, cuando fracasamos y cuando ganamos. Todo ésto son distintas facetas de nosotros mismos. La mayoría de nuestros problemas provienen de que rechazamos partes de nosotros mismos: no nos amamos total e incondicionalmente.
Que la mirada que echamos sobre nuestro pasado no sea de vergüenza. Miremos el pasado viendo en él la riqueza y la plenitud de la Vida. Sin esta riqueza y esa plenitud no estaríamos ho aquí. Cuando nos aceptamos totalmente nos convertimos en seres íntegros y sanos.
Si no te amas total, entera y plenamente, es porque en algún momento aprendiste a no amarte. Pero puedes desaprenderlo. Empieza a ser amable contigo ahora mismo.
Me amo y me acepto tal como soy. Me apoyo, confío en mí y me acepto allí donde esté. Puedo existir dentro del amor de mi propio corazón . Me pongo la mano sobre el corazón y siento el amor que hay en él. Sé que en él hay mucho lugar para aceptarme tal como soy aqui y ahora. Acepto mi cuerpo, mi peso, mi altura, mi aspecto, mi sexualidad y mis experiencias. Acepto todo lo que he creado para mí mismo. Mi pasado y mi presente. Y estoy dispuesta a dejar que mi futuro suceda. Soy una expresión divina y magnífica de la Vida, y me merezco lo mejor de lo mejor. Y lo acepto para mí ahora. Acepto los milagros, acepto sanar, acepto que estoy a salvo. Y sobre todo, me acepto a mí mismo. Soy un ser único y valioso, y me aprecio como tal.-

No hay comentarios:

Publicar un comentario